Llueve… cantaba Serrat con sones melancólicos que despertaban recuerdos de otoños e inviernos idos, de paisajes lejanos con álamos al viento y el cielo gris con nubes bajas tapando la cordillera nevada. Estando en Alemania era fácil volverse a la ventana para añorar momentos entrañables junto a una chimenea en el sur de Chile. La costa de la Tierra Media no se presta para tales accesos de melancolía, su temporada seca trae soles implacables como los del verano santiaguino, a pesar de tener también bosques sin hojas esperando las lluvias que renovarán de verde el paisaje pardusco.
Hoy amaneció lloviendo, con el consabido frescor en el ambiente, mientras termina la temporada seca –llamada “verano” por los locales- y comienza la temporada húmeda y cálida –curiosamente denominada “invierno” por sus lluvias- que desencadenará varios meses de días agobiantes por la sensación térmica, los grillos metiéndose en todas partes y las nubes de mosquitos.
Llueve… y no tiene nada de melancolía.
6 comentarios:
Nostalgia es un sentimiento extraño, está entre la alegría de recuerdos gratos, de evocaciones a momentos felices y la tristeza de la lejania, la añoranza de que vuelvan.
Debe ser un sentimiento fugaz, que pronto sea superado por la visión de la misión encomendada por el altísimo.
Todos hacemos fuerza, juntamos las oraciones y en el corazón de la Madre nos encontramos. Te acompañamos siempre, nuestros ojos serán los tuyos, para cuando mirando las 100 tonalidades de verde de esta primavera (porque la primavera es cuando los arboles se renuevan, en el dia hace calor, pero en la noche refrezca, cuando la fuerza de la naturaleza se puede respirar en cada rincón), también tú las estés viendo.
Así como dice JRI todos estamos unidos en la oración para que Ud. tenga fuerzas y se acostumbre luego al querido calor y a las gotas de sudor que caen desde el cielo. TuPa y Ma.
Gracias por las miradas, gracias por las palabras... por dentro corre la savia verdadera que une brotes extendidos en distintas direcciones desde la misma raiz. Siguen creciendo y manteniendo su origen. Lo que unos dan, lo sostienen otros, lo que ofrendan, los beneficia. "En ellos repercuten tu ser y tu vida..."
P. Pato, hola. Lamentablemente no tengo la prosa que tienes tu y quienes te escriben, pero ello no es necesario para mandarte un gran abrazo. Espero que por allá esté todo bien. Por acá todo de lujo...(tanto así que empiezo a "laborar" la próxima semana....muy viejo...), muchos saludos....
Desde estas tierras mantenemos la sintonía, echamos fuerza por lo que vamos logrando... trabajo, pasos dados y a dar, unidos...
Padre pato:
Muchos saludos desde los faldeos de gondor, donde nos hemos sentado a esperar..., a la diestra de la bandera con la mano en la antorcha listos para prender la pira que ya hace un tiempo que yace enmohecida a nuestro lado.
Las llamas soterradas no iluminan el cielo como los fuegos de antaño pero el calor del magma es el mismo y se llama Cristo. estas pequeñas batallas cotidianas han reemplazado a las cruzadas por bosques, a las caminatas en comunidad, donde ardíamos con un solo corazón. Pero es en estas batallas frente a las hormigas que amenazan por invadir el huerto, y destruir las flores que quedaron de la primavera de los jubileos, que nos damos cuenta sobre la liquidez del corazón.
Y así como la sabia que describes inunda misteriosamente nuestros pechos. Que fantasticas maquetas construimos con nuestros alientos, los planos de una ciudad para todos, que ahora desde las canteras donde se tallan sus cimientos, añoramos. Los días de planes y proyectos los días en que las alas del corazón movían la pluma argentina de nuestra ciudad en sueños.
La fidelidad es un fuego que primero tiene que poner el alma en fusión, para esperar la hora en que se abran las grietas desde donde ya se construye nuestra Sión.
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